En cada beso que
muerdo,
en cada minuto
que te echo de menos
gira el reloj marcha atrás,
deshaciendo lagrimas de sal
que ruedan
curando viejos recuerdos,
como orugas que echan
a volar
A tu lado dolor
compartido convertido en placer,
cosquillas en el
estómago, tu risa erizando la piel…
un amor en camino
con ganas de ser.