Palabras curando sueños, latiendo vida...: marzo 2012

Lydia Díaz Arce

Lydia Díaz Arce

miércoles, 28 de marzo de 2012

Bienvenid@...


BIENVENID@ A MI REALIDAD



Por el cristal de mi realidad he visto al sol
 arropando praderas infinitas de color.
Sin dudar, he visto a un extraño
sostener la debilidad de un anciano.
He visto árboles de puntillas
queriendo llenar el cielo de cosquillas.
He contemplado a un horizonte
pintar el cielo con colores que no existen.
He escuchado una suerte de risa
al ver a un caracol ganar a la prisa.
He visto saltarse las normas a la rutina
teniendo un ardiente affaire con la vida.
He sentido toda la eternidad del universo
en el instante fugaz de un beso.
He visto curarse corazones cobardes
con tan sólo escuchar cantar a un ángel.
He tenido amaneceres parando el tiempo
sobre el horizonte desnudo de mi cuerpo.
He visto coincidencias con el viento a favor
soplar a la soledad para convertir a uno en dos.
He sentido truenos de tormenta llevándose la ira,
dejando en calma a mis días.
Me he emocionado con el sueño de un chiflado,
y he llorado con la verdad de un cuerdo acabado.
He visto estrellas fugaces
vestir a la noche en una fiesta de disfraces.
He arropado la luna en tu mirada
y he llenado de noches tu cama.
He dejado mi alma abierta de par en par
dándote la bienvenida a mi realidad.

viernes, 23 de marzo de 2012

Y volvió sin invitarla...



Malvenida Primavera
Llega la primavera  y yo me siento bajo tierra,
hoy llueve del revés y mis raíces tiemblan
como rayos enterrados por la tristeza
escondiéndose de la vida y su comedia.
Como polen sin aire me ahoga la alergia a tu ausencia, 
y se me inflama un grito en la garganta que acuchilla acordes.
Los días queman la hierba que fumo recordando las flores
que inagotable sembré en tu lecho bailándote lento.
Y vuelve a cambiar la estación y yo sigo en el mismo andén
sin calendario perdiendo trenes de tiempo,
sentada en un banco que ya se oxidó de verme llorar.
Pero no me iré, no es Abril si no llueve en tu cuerpo
no hay días, ni cura, ni gente que me haga olvidar.
Esperaré aquí hasta que desriegues las lágrimas de dolor,
hasta que te conviertas en sol y vuelva el calor.
Y si el abrazo del viento no  trae tu regreso
que se vuelva  huracán y arranque aquel adiós
que me hundió en esta tierra estéril de besos…
…ausente de amor.

domingo, 18 de marzo de 2012

Gris ciudad



Gris ciudad

La ciudad con sonrisa torcida me da la bienvenida a su gris realidad,
sabe que estoy perdida entre su humo y falsedad...
¡Hoy sólo quiero mar!
Aquí le sobran latidos de prisa a mi pecho,
ya no quiero alas para esquivar rascacielos.
Llévate la superficie y acompáñame a nadar en mar adentro.
Ayúdame a parar el tiempo, que hoy me importa sólo el viento,
la luz y tu vaivén en mi cuerpo... lento.
Hoy sólo quiero mar...
y respirar tu amor, vida, en silencio.

miércoles, 14 de marzo de 2012

Tus huellas en mi cuerpo


Aquellas primeras se borraron de la orilla, pero hoy, aún hay veces que esas huellas vuelven a caminar en mi playa.

Tus huellas en mi cuerpo
Hoy tus huellas amanecen en mi cuerpo amoratado,
y le hablan a mi piel del calor de tu boca,
de las ganas con las que muerdes mi vida desesperado
y del sabor a muerte que dejas al pensar en otra.
Una boca que me mata de placer
en desgarros que al gemir cantan a un ayer.
Duelen tus huellas en mi piel,
con cada roce revivo el reencuentro:
bailando un secreto se desnuda el tiempo
y me quedo a vivir en tu acento.
Mi pecho contra tu almohada sin aliento,
sudando sueños despiertos.
Se baña mi razón en tu océano de polvo y ron,
naufrago sin salvavidas húmeda de pasión.
Siento todo el calor del infierno por dentro,
ya sólo respiro el fuego de tu cuerpo,
mis gemidos se ahogan sin aire y muero en tu cielo…
Vuelve a resucitarme con tus huellas en mi cuerpo,
con tu huracán follándome lento,
con tu boca posada en mi sexo…
Con tu amor en un abrazo de luna repuesto.


martes, 13 de marzo de 2012

Sandra




Estas son palabras para Sandra, en Octubre perdimos un trozo de corazón con ella...

La vida y su ausencia 
La vida y su ausencia se empeñan en recordarnos
a base de pellizcos al corazón 
que cada día cuenta, que cada suspiro es efímero, 
que en realidad nada importa... y todo es importante,
que hay algo más en lo que no se ve 
y que éste mundo sin tú sonrisa hoy ya no es el mismo!
Estas lágrimas le dicen al alma rota de una madre
que el amor no todo lo puede y sin embargo, 
aún siente que sin él... nada es posible.

Sin respuestas
Busco en los bolsillos, busco y ya no están!
No las encuentro, no lo entiendo…
y sin embargo los tengo llenos,
repletos de interrogantes enfadados, de ruegos desesperados
que como una escalera de Escher suben al cielo 
y sin hallar salida sumando signos bajan de nuevo,
en cada circulo su vicio aleja el consuelo…
He perdido las respuestas, se me han ido
vinieron con paso lento a lomos de los años
y en un sólo día, en un sólo instante han desaparecido.
Como una estampida de Unicornios huídos
galopan hacia el mundo de la fantasía
el mismo mundo donde debe vivir la justicia,
ese mismo mundo en el que, de existir, tú aún serías.



lunes, 12 de marzo de 2012

Mi Credo



Inauguro mi blog con unas de las primeras palabras que necesité escribir para darle forma a todo lo que estaba sintiendo mi cabeza y pensando mi corazón. Espero que os guste...



Mi credo 


A día de hoy…
No creo en la sonrisa que modela,
ni en ser lo que de mí se espera.
No creo en la crítica por defecto.
Ni en que haya causa sin efecto.
No creo en el dichoso “¿Qué dirán?”
Ni en promesas que no se cumplirán.
No creo en los que siempre el “yo” venden
y jamás el “tú” compran ni comprenden.
No creo en sentenciar por lo que parece.
No creo en el que cree que por derecho divino todo se merece,
ni creo en el que siempre presume de lo que carece.
Nunca creí en todas las mentiras piadosas
que borrachas de cobardía cuentan tantas bocas.
Creo en la perspectiva de la relatividad
que otorga a cada parte un trozo de verdad.
Siempre desconfiaré del que nunca calle y siempre diga,
y del que multiplique las pajas y divida su viga.
Definitivamente nunca creeré en el dinero,
verde papel que vuelve negro el mar y gris el cielo,
que al mejor postor de la salud hace dueño,
y hace del político un comerciante de sueños.
No creo en lo que dice que debo esta sociedad
que siempre esconde un “esperar” detrás del “dar”.
Sin embargo, creo en estar incondicional a tu lado,
porque creo en el ser humano que ama aún sin ser amado.
No creo en la perfección sino en el error y la libre elección.
Creo en el hoy, porque el ayer y el mañana mueren en mi imaginación.
Creo que siempre hay un principio y un fin para cada renglón
y creo en gritar el estribillo mientras dure la canción.
No creo que exista negro sin blanco ni luz sin sombra.
Creo en la magia de la Luna que cada noche me asombra.
Creo que en las palabras que sin tachones escriben hechos.
Creo en crecer bajo un techo por legítimo derecho,
en nunca pasar hambre por nacer en el mal continente
y creo que no hay peor mentiroso que el que a sí mismo se miente.
No creo en tener que disimular si te quiero abrazar,
creo  en dejarme llevar y sin miedo poderte besar.
Creo en la guerra que se lleva y en la paz que deja el mar.
No creo que hayas nacido para sacrificar sino para disfrutar.
Creo que las coincidencias son señales del destino,
Y creo que tu actitud llena de barro o de rosas el camino.
Creo en la curiosidad de un niño y la calma de un anciano.
Creo en la música y el silencio creando melodías de la mano.
Creo en la sabiduría de mi naturaleza, en mi energía e intuición.
Creo en bailar con la vida bajo las estrellas y a la luz del sol.
Creo en el brillo de tus ojos al espontáneo sonreír de mi boca.
Creo que nada mas importa si cada noche tu alma me toca.
Creo en tu piel y en lo que me hace sentir,
Creo en mí, creo en tí y creo en ser feliz.
Creo en la verdad si la dicta tu corazón…
A día de hoy…
Creo en soñar la vida a gritos con la libertad de mi voz.