Mi credo
A día de hoy…
No creo en la sonrisa que modela,
ni en ser lo que de mí se espera.
No creo en la crítica por defecto.
Ni en que haya causa sin efecto.
No creo en el dichoso “¿Qué dirán?”
Ni en promesas que no se cumplirán.
No creo en los que siempre el “yo” venden
y jamás el “tú” compran ni comprenden.
No creo en sentenciar por lo que parece.
No creo en el que cree que por derecho divino todo
se merece,
ni creo en el que siempre presume de lo que carece.
Nunca creí en todas las mentiras piadosas
que borrachas de cobardía cuentan tantas bocas.
Creo en la perspectiva de la relatividad
que otorga a cada parte un trozo de verdad.
Siempre desconfiaré del que nunca calle y siempre
diga,
y del que multiplique las pajas y divida su viga.
Definitivamente nunca creeré en el dinero,
verde papel que vuelve negro el mar y gris el
cielo,
que al mejor postor de la salud hace dueño,
y hace del político un comerciante de sueños.
No creo en lo que dice que debo esta sociedad
que siempre esconde un “esperar” detrás del “dar”.
Sin embargo, creo en estar incondicional a tu lado,
porque creo en el ser humano que ama aún sin ser
amado.
No creo en la perfección sino en el error y la
libre elección.
Creo en el hoy, porque el ayer y el mañana mueren
en mi imaginación.
Creo que siempre hay un principio y un fin para
cada renglón
y creo en gritar el estribillo mientras dure la
canción.
No creo que exista negro sin blanco ni luz sin
sombra.
Creo en la magia de la Luna que cada noche me
asombra.
Creo que en las palabras que sin tachones escriben
hechos.
Creo en crecer bajo un techo por legítimo derecho,
en nunca pasar hambre por nacer en el mal
continente
y creo que no hay peor mentiroso que el que a sí
mismo se miente.
No creo en tener que disimular si te quiero
abrazar,
creo en dejarme llevar y sin miedo poderte
besar.
Creo en la guerra que se lleva y en la paz que deja
el mar.
No creo que hayas nacido para sacrificar sino para
disfrutar.
Creo que las coincidencias son señales del destino,
Y creo que tu actitud llena de barro o de rosas el
camino.
Creo en la curiosidad de un niño y la calma de un
anciano.
Creo en la música y el silencio creando melodías de
la mano.
Creo en la sabiduría de mi naturaleza, en mi
energía e intuición.
Creo en bailar con la vida bajo las estrellas y a
la luz del sol.
Creo en el brillo de tus ojos al espontáneo sonreír
de mi boca.
Creo que nada mas importa si cada noche tu alma me
toca.
Creo en tu piel y en lo que me hace sentir,
Creo en mí, creo en tí y creo en ser feliz.
Creo en la verdad si la dicta tu corazón…
A día de hoy…
Creo en soñar la vida a gritos con la libertad de
mi voz.